Tal vez externos, tal vez internos, de las cenizas casi apagadas resurge la pequeña llama que da alas a este diminuto diablo, pequeña imagen de lo que una vez fue, con la luz roja de sus diminutos y malvados ojos.
Volvemos al mundo, en un silencioso estallido de rescoldos incandescentes.
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3 comentarios:
Ole, ole, ole ya estamos tos!!!!
volvemos a vernos...
Un abrazo, con tu permiso
Joer! Podías haber No Cerrado el otro! Bueno de todas maneras Bienvenido seas
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